NUEVA WEB UNA CITA EN FLAMINGOS






AHORA SEGUINOS EN NUESTRA NUEVA WEB:

WWW.UNACITAENFLAMINGOS.TK




13 diciembre 2011

BUNBURY, LICENCIADO LATINOAMERICANO

La búsqueda del alma latinoamericana a través de la canción, ha sido el leit motiven los últimos discos de Enrique Bunbury. "Licenciado Cantinas", su nuevo álbum, no es la excepción, ya que se trata de una selecta relectura del cancionero popular latino, con piezas tan sentidas como las propias que ha puesto en su discografía.

El primer sencillo es "Ódiame", ese inmortal vals peruano que ahora se electrifica, y en una versión gallarda repite el mismo efecto del disco anterior: mostrar un cover como primer single, e imponer su estilo propio sobre la original (lo que hizo con "Frente a Frente" en "Las Consecuencias"). Eso mismo es lo que repite en canciones como "El solitario (diario de un borracho)", "El día de mi suerte" o "La tumba será al final", sonar con comodidad y propiedad.

"Licenciado Cantinas" es un disco de taberna, pero una más intelectual, de esos bares sombríos y oscuros que están llenos de historias, y si a estas alturas nadie duda de que Bunbury sea un intérprete extraordinario, en este disco nuevamente termina sorprendiendo, sonando más cerca a "El viaje a ninguna parte" (otro de sus discos dedicados a Latinoamérica) y secundado con maestría por Los Santos Inocentes, una banda que puede transformar en acordes el ADN del ex Héroes del Silencio.

Por alguna Razón Enrique Bunbury y todos a los que les ha abierto la puerta (entiéndase Nacho Vegas, Carlos Ann, Loquillo, Mercedes Ferrer, Riveros, Shuarma, Morti, Copi, Ivan Ferreiro y unos pocos mas), son aceptados en América con un fanatismo mucho mayor que en España, quizás por su condición de rockeros literatos y la ebullición constante de la poesía en países sudamericanos, como las de las canciones que se tributan en este disco.

Nuevamente Bunbury actúa como un Rey Midas, revitalizando un cancionero empolvado, pero que no ha perdido ni un centímetro de su encanto original a través de tantas décadas. "Licenciado Cantinas" suena como un disco propio sentido, cantado y llorado en los códigos propios a los que ya nos tiene acostumbrados Bunbury, quien aún permanece empinado solo como el cantautor en español más interesante de su generación, con una madurez cronológica alcanzada a través de la búsqueda en cada uno de sus discos, mientras otros prefirieron cerrarse en fórmulas para agradarle a la radio.

La autenticidad es la llave con la que avanza por nuestras tabernas, tal como lo hicieron los autores originales de estas canciones, que llegaron décadas antes a esas cantinas y bebieron mucho antes que el en esas copas que tantas historias guardan.

Al final resalta el que Bunbury suene más deliciosamente latino que cualquier compositor salido del cono sur (la mayoría empeñados en hacer del continente una postal calculada de world music), y en 15 canciones distintas, encontró el giro para que calzaran en su nuevo trabajo, en una línea de tiempo nueva crear su propio personaje, el Licenciado Cantinas, un cowboy de bar, siempre en la búsqueda del desierto, ya sea en el paisaje o en su corazón.

Fuente: Reeditor (España)

1 comentario: