Fueron casi dos horas de concierto en las cuales el español se sintió a gusto. Se le veía emocionado con el público, aproximadamente tres mil personas, que no lo defraudaron y no pararon de corear sus temas. Incluso se animó a regresar dos veces al escenario.
La noche empezó criolla. Una batería de temas 100% peruanos que animaron al público y calentaron el ambiente. La Guardia Vieja, una agrupación llena de figuras criollismo, fue la encargada de abrir el concierto. Este fue uno de los pedidos de Bunbury, quien de esta manera le ofrecía un merecido homenaje a nuestra música.
A las 9:30 p.m. hacían su ingreso Los Santos Inocentes: Ramón Gacías (batería), Robert Castellanos (bajo y coros), Jorge 'Rebe' Rebenaque (piano, acordeón y cuerdas), Jordi Mena (guitarras, mandolina) y Álvaro Suite (guitarras y coros). La primera de la noche fue "El mar, el cielo y Tú", tema introductorio del Licenciado cantinas y que se encargó de establecer el puente musical.
Le siguieron "Llévame" y "El Solitario". Para ese entonces, el público ya se empezaba a rendir ante el aragonés. De esta forma, la noche se hizo cantinera, un presagio del matiz que tomaría el show.
"Buenas noches limeños y limeñas. Siempre es un gusto estar en esta tierra bendita. Para esta noche hemos preparado un 'set list' muy especial, esperamos que sea de su agrado". El repertorio de Bunbury no defraudó. Tuvo temas de todos sus discos e inclusive se dio el lujo de no tocar canciones de Héroes, algo que sí había hecho en 2009 cuando llegó por primera vez a nuestra capital como solista. Sin duda un signo de desmarque total con la banda ibérica.
Licenciado cantinas es la última expedición sonora del español. Aquí coge canciones populares de la cultura latinoamericana y les imprime su marca registrada a ritmo de rock, vals, tango, corrido, folclor e incluso cumbia.
El concierto tuvo varios pasajes "Made in Perú", no solo por la interpretación de "Ódiame" y "Vida", dos valses peruanos presentes en su último disco, sino también por "Canto el mismo dolor" un tema escrito por Bunbury en nuestro país y que forma parte de su cuarta placa "El viaje a ninguna parte".
"El Extranjero", "Los habitantes", "Big Bang", "No me llames cariño", "Sólo si me perdonas", "Sácame de aquí", "Que tengas suertecita" y "Sí" fueron algunos de los temas más coreados por el público. Fueron 22 temas y seguramente para los fanáticos faltaron otros 22 más. Aunque según los comentarios al final del show, el paquete de canciones fue sólido y surtido.
¿Qué decir del concierto? Fue una noche de bar hecha canciones, el reencuentro del cantante con su fanaticada cautiva y, por qué no, el deslinde definitivo con Héroes del Silencio en este tour Licenciado cantinas. Enrique Ortiz de Landázuri Izardui o simplemente Bunbury llegó a Lima y se licenció ante su gente. Fue una ceremonia emotiva, con brindis incluido, y cargada de mucha música.
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